PRONTA IGUALDAD

Desde hace muchas décadas el hombre domina los centros neurálgicos del mundo, ya sean social, laboral o familiar. La mujer se ha formado en muchos casos a su sombra, y sin participar en decisiones importantes.
En otros casos “el sexo fuerte” ha moldeado a la mujer con un estereotipo frívolo y hasta vulgar logrando que mayormente se observe como un maniquí frívolo y vacío. Sin embargo a la vez un sector muy grande de mujeres, como una red de pequeñas abejas obreras van avanzando en el mundo, silenciosas y seguras hacia su destino.

 Desde las madres trabajadoras, investigadoras, médicas, docentes, voluntarias de hospital, cooperantes, misioneras, etc., todas en mayor o menor medida están sembrando una semilla que en algún momento dará sus frutos. Ya este año pasado tres mujeres muy valientes fueron elegidas premio novel de la paz para orgullo nuestro.

De todas maneras no nos podemos ilusionar plenamente porque hace poco vi una imagen que creo no olvidaré en mi vida. Una pequeña mujercita, menor de edad obligada a casarse con un hombre mayor que la pretendía prostituir. Ella con gran valor intentó resistir, pero fue golpeada  y vejada brutalmente en repetidas ocasiones y sólo su capacidad de negación la hizo sobrevivir a esa situación humillante y penosa.
Estos hechos deberían hacer reflexionar a las civilizaciones, donde el ser mujer y pobre puede ser trágico e incluso llegar a perder la vida.

Sin embargo sigo pensando que no está todo perdido y difundiendo estas atrocidades seguramente llegue el momento en que todo haya terminado y no sea más que un triste recuerdo y la mujer logre tener su espacio verdaderamente a la par del hombre como justamente merecemos  y por la que tanto se ha esforzado. Esa sería la meta soñada.
NORA